Harold Sakuishi (ハロルド作石) es un mangaka y músico japonés conocido por su destacada carrera en el mundo del manga y por su amor por la música. Nació el 8 de abril de 1969 en la ciudad de Higashiosaka, Prefectura de Osaka, Japón. Desde temprana edad, Sakuishi mostró un interés apasionado tanto por el dibujo como por la música, dos campos que marcarían profundamente su carrera futura. Comenzó a dibujar manga durante sus años de estudiante, inspirado por el famoso autor de manga Hirohiko Araki, creador de «JoJo’s Bizarre Adventure». La carrera profesional de Sakuishi despegó en la década de 1990 cuando se convirtió en un mangaka reconocido. Su obra más conocida es «Beck», que fue serializada en la revista «Weekly Shōnen Magazine» desde 1999 hasta 2008. «Beck» narra la historia de un grupo de jóvenes que forman una banda de rock y su búsqueda para alcanzar la fama en la escena musical japonesa. La serie fue elogiada por su autenticidad en la representación del mundo de la música y se convirtió en un éxito tanto en Japón como en el extranjero. Otra obra notable de Sakuishi es «Seven Shakespeares», que se publicó desde 2010 hasta 2012. En esta serie, Sakuishi presenta una reinterpretación de las obras de William Shakespeare, utilizando una mezcla única de elementos históricos y contemporáneos. Además de su carrera en el manga, Harold Sakuishi también ha incursionado en la música. Es el vocalista y guitarrista de la banda «BECK», que lleva el mismo nombre que su obra más famosa. La banda ha lanzado varias canciones inspiradas en la serie y ha contribuido a establecer un puente entre el manga y la música. La habilidad de Sakuishi para combinar su pasión por el manga y la música le ha ganado una base de fans leales y ha cimentado su posición como un creador versátil y talentoso en la industria del entretenimiento japonés. Harold Sakuishi sigue activo en el campo del manga y la música, y su trabajo continua siendo apreciado por los aficionados en todo el mundo. Su contribución al mundo del entretenimiento, tanto como mangaka como músico, ha dejado una huella duradera en la cultura pop japonesa y global.